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Tener una clínica veterinaria puede ser un buen proyecto, una preocupación o las dos cosas a la vez.

Si eres más veterinario que empresario ya sabes lo difícil que es gestionar una empresa. Sentirás la soledad de tu silla, perdiendo tiempo en revisar los resultados y sin saber si estás gastando bien, mejor o de más.

Deja que te describa como es tu día a día, a ver si acierto.

Tienes una clínica veterinaria porque estudiaste veterinaria y te gusta ir por tu cuenta. Pero nadie te explicó lo complicado que puede ser llevar los números de una clínica, el personal y los clientes.

Puede que tengas un programa de gestión en la clínica, pero si te pregunto por la fidelización de tus mejores clientes no tienes una idea clara.

Sabes que no pierdes dinero, pero tampoco te estás forrando. Intuyes que tienes costes innecesarios pero no sabes cuáles o cómo mejorarlo.

Ya estás sintiendo la soledad de tomar decisiones.

No es sencillo estar en tu piel. Dirigir un negocio como el tuyo es difícil, para qué engañarse. Nadie está a tu lado para tomar las pequeñas y grandes decisiones. Solo tú sabes lo que es cerrar un mal mes, un mal trimestre. Con todas las obligaciones a tu cargo, tanto si te va bien como si no.

El mercado, además, está cambiando a toda velocidad y ya las cosas no son como hace unos años. Ya tenemos aquí a los grandes grupos, con su marketing, sus bajos costes de compra y sus inversiones millonarias.

Saber tomar buenas decisiones en una situación así es fundamental. Necesitas tener referencias claras para conocer dos cosas.

La primera, cuál es exactamente la salud de tu negocio y cómo puedes tenerlo bajo control. Que no sea el negocio el que te marca el ritmo, sino al contrario. Que seas tú quién está al mando de forma consciente.

La segunda, importantísima, que tengas acceso a lo que hacen otras clínicas como la tuya que ya se han unido y ya son más competitivas.

Nadie vendrá a ayudarte si te va mal.

En España la esperanza de vida de una empresa es de SOLO 10 años. Y menos del 40% de las nuevas empresas supera los primeros cinco años, así que hazte una idea de lo complicado que resulta simplemente sobrevivir.

Y lo peor de todo es que de las que quedan muy pocas tienen una rentabilidad adecuada. Muchos, muchísimos, de los negocios que se crean todos los años solo sirven para pagar las nóminas, y ya. Negocios que, prácticamente, gastan todo lo que ingresan y que ni en sueños podrían afrontar una inversión importante. La mayoría necesita pedir un crédito cuando se trata de dar un salto adelante.

Deja que te enseñe la cruda realidad. Si tu clínica acaba yendo mal no esperes que aparezca por allí nadie a ayudarte.

Los del banco no vendrán a echarte una mano para rescatarte. Ya sabes, no financian pérdidas ni perdedores. No lo dicen así, pero es lo que hacen.

Pero sí recibirás algunas visitas algo más incómodas.

La Agencia Tributaria, en cambio, sí vendrá. Te reclamará el IVA que le debes una y otra vez. Con insistencia, con intereses, con sanciones.

También vendrá la Seguridad Social, con la misma música.

Vendrán los acreedores, los proveedores y los empleados que antes fueron tu familia.

Los propietarios de tu local también te visitarán. O mejor, te enviarán algo por escrito para recordarte tus obligaciones…y sus derechos a echarte.

Es muy triste, pero así es el final de todas esas empresas que no pasan de los 5 años. Lo intentaron, lo pusieron todo pero no pudo ser. A lo mejor hasta habían pedido un crédito, o habían abierto una póliza de crédito. Alguno hasta puso su casa de garantía, algo que desaparece más pronto que tarde.

Las cosas deberían ser distintas, se debería poder tolerar el error, pero no es así. En esta pelea, sólo tienes una bala. Y debes usarla con cabeza.

Más de 90 clínicas como la tuya ya duermen tranquilas.

Todo eso que te pasa ya lo han vivido montones de clínicas antes que la tuya. Lo sabemos porque llevamos mucho tiempo ayudando a clínicas independientes que quieren vivir mejor y más de 10 años. Así que algo hemos aprendido por el camino.

Llevamos miles de horas, literalmente, creando sistemas que funcionan, poniéndolos a prueba en decenas de clínicas de todo el país. En el momento de escribir esto más de 90 clínicas son clientes de Diferentia, así que hazte una idea de todo el desarrollo de estrategias y sistemas que hemos creado.

Entre otras cosas hemos identificado cuáles son los indicadores que debes tener bajo control, sabemos qué se cuece en el mercado mejor que nadie y tenemos estrategias que funcionan.

Hemos visto desaparecer muchas clínicas del mercado, la gran mayoría de los casos por culpa única y exclusivamente de su mala gestión. Porque lo que está claro es que el mercado de las clínicas veterinarias no para de crecer, pero no para todas por igual.

Las clínicas mal gestionadas acaban teniendo más problemas de los que pueden solucionar.

En cambio, las clínicas que se ponen las pilas acaban creciendo más que la media del mercado, es un hecho.

Es algo que hemos aprendido a fuerza de meterle horas, codo a codo con todo tipo de clínicas. Grandes, pequeñas, medianas, de todo.

Eso sí, la mayoría son clínicas que han decidido negociar juntas sus costes y ya están pagando menos que tú POR LO MISMO. Somos ya el grupo de compra de clínicas independientes más grande, así que echa cuentas.

Todo esto lo hemos volcado en nuestro programa Tranquilidad. Un servicio que están utilizando ya montones de clínicas como la tuya para dormir algo mejor, con todo bajo control.

Esto es lo que encontrarás en el programa Tranquilidad:

1. CUADRO DE MANDO ULISES

Tendrás acceso a un cuadro de mando único de tu clínica, gestionado por el mejor software de gestión de clínicas veterinarias independientes. Un software único en el mercado que hemos desarrollado invirtiendo durante años centenares de horas en programación a medida.

No es un programa de contabilidad más, eso sería demasiado simple.

Ulises es la puerta a que tengas información fiable, rigurosa y estructurada para tomar buenas decisiones. Y, aunque lo vas a necesitar poco, tendrás el soporte de Diferentia a cada paso.

2. HACEMOS EL CAMINO CONTIGO

Se acabó lo de la soledad, para siempre. Desde el primer minuto te vamos a acompañar y ya no te soltaremos. Te asignaremos un consultor de nuestro equipo, alguien que ya está trabajando con muchas más clínicas como la tuya y que te puede ser de gran utilidad.

Utiliza su conocimiento, seguro que te ayuda a tomar mejores decisiones en la estrategia de tu clínica.

3. GRUPO DE COMPRA

Tendrás acceso, si así lo quieres, al Grupo de Compra de Diferentia. Clínicas muy parecidas a la tuya y que ya negocian conjuntamente sus precios con las grandes farmacéuticas.

Una herramienta imprescindible si quieres conseguir dos objetivos de una tacada.

El primero, competir con las mismas armas con los grandes grupos.

El segundo, mejorar la eficiencia de tus operaciones con esta pequeña decisión.

El precio de este servicio es de tan solo 275 € + IVA /mes más una cuota inicial de 900 €, un precio ridículo para el valor que aportará a tu clínica.

Opcionalmente, podrás acceder al Grupo de Compra por una cuota de 105 € + IVA /mes. Francamente, sólo esta parte te significará un ahorro importantísimo en tus cuentas.

Esto es lo que dicen de nosotros

FAQ

  • El precio, ¿es negociable?
    Sinceramente, si no te puedes permitir una cuota como esta tal vez tengas un problema más grave en tu negocio. Con esto no quiero decir que no podamos ayudarte, al revés. Simplemente que primero debes estabilizar tus resultados antes de plantearte nada más.

 

  • ¿Qué pasa si solo quiero alguno de los servicios, puedo escoger?
    Este programa está diseñado así después de años de ponerlo en marcha en clínicas veterinarias independientes de todo tipo. No creemos que tenga sentido trocearlo o vender solo una parte, no funcionaría.

 

  • ¿Tiene garantía?
    No, esto no es una lavadora. Si crees que este servicio no te va a aportar nada que no sepas, o que es demasiado caro, o que no tenemos ni idea de lo que hacemos, mejor no entres. Sin problema, de verdad.

    También te digo que las clínicas que empiezan a crecer ya luego no quieren parar.

 

  • ¿Vendréis a mi clínica?
    De entrada, no. Siento decirte que eso es inviable salgo que se dé alguna casualidad o fuerza mayor. Utilizamos la tecnología para estar presentes sin tener costes que disparen los precios.